El subdelegado del Gobierno en Castellón, Antonio Lorenzo, ha explicado en la rueda de prensa celebrada al término de la Junta de Seguridad de Burriana que entre los días 2 y 11 de septiembre alrededor de 800 efectivos policiales velarán por la seguridad durante las fiestas de la Misericordia. De estos agentes, alrededor de 400 pertenecen a la Guardia Civil. El resto, serán efectivos de la Policía Local y de la Unidad del Cuerpo Nacional de Policía adscrita a la Generalitat Valenciana.
Los efectivos de la Guardia Civil no serán únicamente los pertenecientes al cuartel de Burriana, ya que en función de las necesidades del servicio, se recurrirá a otros agentes de la Comandancia de Castellón, de las distintas especialidades con las que la Benemérita cuenta en esta provincia.
Lorenzo ha explicado que lo que se pretende con este dispositivo de seguridad es “conseguir que las fiestas sean únicamente eso, fiestas”, y que “cuando se produzca alguna circunstancia que pueda alterar la tranquilidad de la población, los cuerpos policiales puedan dar una rápida y eficaz respuesta”.
El subdelegado ha querido hacer “un llamamiento a la responsabilidad de la población para que en los espectáculos taurinos no tomen parte ni menores de edad, ni tampoco personas que puedan tener alguna limitación física o psíquica por hacer ingerido alcohol o por alguna otra razón”. En este sentido, ha dicho que “los padres deben evitar que sus hijos menores participen en este tipo de espectáculos” y al igual que ha indicado el alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, ha insistido en que “los agentes del orden harán cumplir la normativa vigente” y que “cuando se estime conveniente, se impondrán sanciones que pueden oscilar entre los 600 y los 30.000 euros”.